¿Qué necesitas para crecer espiritualmente?
“No hay una manera rápida y fácil de hacer de la vida de Dios la vida que llevamos,” escribe la hermana Joan Chittister, una monja benedictina, teóloga y contemplativa moderna. “Se necesitan años de lectura sagrada, años de escuchar toda la vida, años de aprender a escuchar a través del filtro de lo que hemos leído. Una generación de Pop Tarts, chocolate instantáneo, cenas con la TV, cálculos de computadora y copias de Xerox no nos prepara para la lenta y tediosa tarea de escuchar y aprender, una y otra vez, día tras día, hasta que finalmente podamos escuchar a las personas que amamos y amar a las personas que hemos aprendido a odiar y llegar a comprender cómo la santidad está en el aquí y ahora para nosotros.”
Nuestro principal trabajo como comunidad de fe es ayudar y desafiar a nuestra comunidad a desarrollarse como seguidores de Jesucristo, para que podamos, en las palabras de la hermana Chittister, crecer en la santidad de Dios que está en el aquí y ahora. Este es un proceso de toda la vida que no se puede realizar en una clase o conversación, sino en el transcurso de muchos servicios de adoración, conversaciones casuales y experiencias de aprendizaje tanto dentro como fuera del edificio de la Iglesia.
¿Cómo podría Christ Church Cathedral nutrirlo y apoyarlo a usted y a los suyos en una vida de renovación y transformación espiritual? Mientras reflexionamos y nos preparamos para nuestro próximo capítulo de ministerio juntos, queremos saber: ¿Qué podría ayudarlo a nutrir su alma para que pueda experimentar la santidad de Dios en el aquí y ahora y le dé el poder para amar y servir a su prójimo con gozo y plenitud? ¿Qué herramientas necesita para participar en lo que nuestro Obispo presidente Michael Curry llama el movimiento de Jesús “amoroso, liberador y vivificante”? Este domingo, esperamos que se una a nuestras conversaciones de Levántate, Renace, Recuerda después de cada servicio para compartir tus pensamientos, esperanzas y sueños sobre las formas en que podemos cuidarnos y nutrirnos unos a otros para hacer la obra de Dios.
— El Muy Rvdo. Gray Lesesne, D.Min.
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