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Paul Valliere

Mi esposa Marjo y yo nos unimos a Christ Church Cathedral en 1982 cuando nos mudamos a Indianápolis. Nos unimos a Christ Church porque era entonces, como lo es ahora, la más urbana y más diversa de las parroquias episcopales de Indianápolis. Las experiencias de liderazgo en CCC por las cuales estoy particularmente agradecido incluyen servir en el comité directivo de las conferencias bíblicas anuales de CCC a lo largo de la vida de la serie (más de quince años), presidir un comité de adoración en Christ Church, liderar una serie de estudio de Cuaresma en el Libro de los Salmos, y sirviendo un término de tres años en la Junta Parroquial durante el periodo de Decano de Steve Carlsen.

Mis razones para aceptar una nominación para postularse para la elección a la Junta Parroquial en la actualidad pueden resumirse de la siguiente manera. En los últimos años, Christ Church ha llevado a cabo una impresionante variedad de ministerios a las comunidades más allá de nuestros muros a través de subvenciones a numerosas organizaciones comunitarias (nuestros socios del Pacto), a través del testimonio público sobre temas de la vida nacional e internacional, y de otras maneras. Estos importantes ministerios cuentan con todo mi apoyo. Sin embargo, los problemas y preocupaciones en los que me gustaría trabajar si fuera elegido a la Junta parroquial tienen que ver principalmente con la vida interna de nuestra congregación. Una de estas preocupacioneses la disminución en el número de promesas anuales en nuestra congregación (un problema que tiene que ver con la participación, no con
los dólares). Una segunda preocupación es mejorar la comunicación entre la sacristía y la congregación. Una tercera preocupación es abordar el desgaste continuo de los miembros de CCC desde hace mucho tiempo. Como todos nosotros, estoy muy contento de ver un crecimiento significativo en los nuevos miembros de Christ Church en los últimos años, pero también debemos enfrentar el problema del desgaste. Una cuarta preocupación que me apasiona es encontrar formas de apoyar el desarrollo espiritual y vocacional de nuestros miembros jóvenes adultos (estudiantes universitarios, futuros estudiantes universitarios y adultos jóvenes en el mundo laboral). Una quinta preocupación es la promoción del aprendizaje cristiano en toda la congregación: el aprendizaje bíblico sobre todo, pero también aprender sobre los credos, la liturgia y la historia de la Iglesia. Esta temporada de transición en nuestra parroquia me parece un buen momento para reflexionar sobre estas y otras preocupaciones relacionadas con la vida interna de nuestra congregación.

Finalmente, quiero compartirles que enseñé religión, humanidades y estudios rusos en la Universidad de Butler durante treinta y seis años. Me retiré de la enseñanza en 2018, pero sigo siendo un erudito activo. Actualmente estoy trabajando en un libro sobre cristianismo y derecho en Rusia.

Clic aquí para revisar la invitación de Deán Mary.